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| Por: Rodrigo Vega |
Ser joven y no ser
revolucionario es una contradicción hasta biológica, dijo alguna
vez Salvador Allende.
Esto lo tomaron en serio
los estudiantes secundarios, luego de la visita del Papa Francisco,
en el encuentro del colegio Cristo Rey, el mensaje del Papa les llegó
y comenzó la revolución. Algunos estudiantes que sabían de la
realidad de la educación en el Paraguay, comenzaron a actuar. ¿ Era
necesario que venga el Papa para reaccionar?.
Dejo la pregunta para que
cada uno nos hagamos cada vez que veamos un problema en nuestro país,
no solo el de la educación, que es fundamental para la evolución de
la sociedad.
Volviendo al tema de la
juventud y la revolución, hasta se me llenaron los ojos de lágrimas
cuando escuchaba a los jóvenes por radio, en increíbles discursos
que le hace 100 - 0 a cualquier intento de político que tenemos en
el país y que nos representa hoy en día. Comenzando por el
presidente que pasado un poco de copas, según un parlamentario,
protagonizó un bochornoso episodio (hasta es preocupante en manos de
quién estamos).
Mencioné lo del
presidente para darnos cuenta que no sabemos elegir y que necesitamos
jóvenes como los que están demostrando su liderazgo y no solo
piensan en farras, palitos de selfie o que tipo de equipo pueden
colocar a su vehículo para torturar al barrio con sus horribles
gustos musicales.
En estos días me
preguntaba ¿Y LOS UNIVERSITARIOS?. Sí, me pregunto por ellos por que
la generación que peleo en esta zona del país por el boleto
estudiantil en la época de la secundaria y fue referencia en ciertas
facultades ya no están, se recibieron, o se encuentran en otra
etapa.
Fueron reemplazados por
una generación que al parecer no le interesa la educación que
recibe o simplemente se conforma. Necesitamos jóvenes lideres
universitarios de este país joven pero golpeado, usado y mal tratado
por unos cuantos viejos. Necesitamos jóvenes críticos que
construyan un país, no en un futuro, en un presente mediante sus
acciones. Necesitamos también una revolución de los estudiantes
universitarios. Necesitamos, y es urgente, una SENTATA UNIVERSITARIA para debatir la situación de la educación superior.
Ojalá la marcha de mañana
sea el punto de inicio, para los que realmente desean cambiar la
educación, desde las autoridades y cada uno de nosotros, los que
somos parte de la sociedad
Los jóvenes que limpiaron
Ciudad del Este de propagandas políticas, los estudiantes
secundarios y algunos universitarios son la luz de la esperanza que
se apagaba en otros.
¡GRACIAS!
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