Por Salvatore Brienza
“Mi hijo ya está muerto” decía días atrás la señora Obdulia
Florenciano, madre del policía Edelio Morínigo Florenciano, en un lamento ya sin
lágrimas. Cuando la realidad hace añicos
la esperanza de recuperar con vida a su hijo secuestrado por el EPP, las lágrimas
son una molestia para no ver ese triste final.
Una hoja encontrada en uno de los tantos campamentos
abandonados por el EPP, dice que Edelio Morínigo está muerto, pero no revela el
lugar de su entierro. Las autoridades militares no pueden confirmar ese dato,
porque no tienen “absolutamente nada” de que aferrarse para hacerlo.
Algo parecido fue con Abraham Fehr, cuyos familiares tampoco
tenían pruebas de vida. Sin embargo, la comunidad Menonita pagó al EPP, una
buena cantidad de dinero y distribuido víveres a sectores pobres para
rescatarlo con vida, pero lo único que consiguieron fue la ubicación del cadáver
y la fecha de fallecimiento.
Pero Edelio era un policía. Edelio era hijo de un campesino.
Edelio era un “prisionero de guerra”. Edelio no tendría el mismo trato. Edelio
era “el peón en el tablero”. Edelio
era “sacrificable”. Edelio hizo el juramento de “morir por la patria, si
necesario fuere”.
Fuente ABC COLOR |
Las grandes preguntas son: “¿Está muerto?, ¿Cuándo murió?,
¿Cómo murió?, ¿Dónde está enterrado?, ¿Cómo se puede saber?, ¿La FTC ya tenia
esta información?.
El actual Presidente de la Republica Horacio Cartes, recibió,
al inicio de su mandato todo “el poder político, militar y económico” para
eliminar el EPP y en su discurso del 15 de agosto del 2013 decía: “Puedo asegurarles
que no nos van a marcar la hoja de ruta ni criminales ni grupos armados, en un
país donde sabemos muy bien que el estado de derecho y la justicia serán
ofrecidos a todos los habitantes de nuestro país”[1]
Sin embargo, tan sólo a dos días de asumir el gobierno, el grupo terrorista asesto un golpe que inició el periodo de mayor cantidad de secuestros, heridos y muertos en filas de la Policía y las Fuerzas de Tarea Conjunta.
Sin embargo, tan sólo a dos días de asumir el gobierno, el grupo terrorista asesto un golpe que inició el periodo de mayor cantidad de secuestros, heridos y muertos en filas de la Policía y las Fuerzas de Tarea Conjunta.
En estos momentos, la ciudadanía “almuerza la
noticia” de que un compatriota ha muerto por la “desidia, inacción e insensibilidad del gobierno de turno” que no
ha sabido nunca explicar a la familia la situación en que se encontraba.
Fuente ABC COLOR |
A pocos días de las Elecciones Generales
Presidenciales, en medio de este dolor paraguayo que nunca termina debemos
seguir pensando en que somos un pueblo de cretinos para seguir eligiendo a los
mismos de siempre o somos tan inútiles para
no cambiar, de una vez por todas, la realidad de nuestro país.
Descansa en paz Edelio Morínigo. Que tu muerte no sea la bandera de los discursos políticos, ni de políticos que nunca movieron un dedo para recuperarte con vida. Paz en tu tumba hermano…, estés donde estés.
Descansa en paz Edelio Morínigo. Que tu muerte no sea la bandera de los discursos políticos, ni de políticos que nunca movieron un dedo para recuperarte con vida. Paz en tu tumba hermano…, estés donde estés.
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