Por Fabián Franco
El día 10 de abril del 2018, un grupo de militares de la FTC,
acompaña una delegación de inspección de la CONATEL para sugerir el “cierre” de
la radio comunitaria FM RECORD de la ciudad de arroyito, con 13 años de vida,
por no poseer la renovación de la licencia de la CONATEL.
La radio, ha solicitado en mayo del 2017 la renovación de la licencia,
sin conseguirla aún, porque desde la CONATEL dicen que por una radio no pueden
ir hasta allí y que lo harán en la brevedad posible, pasando ya casi un año de
aquella solicitud.
La Radio FM RECORD presta un servicio social, incluso dando espacio
a la FTC, dónde años anteriores habían tenido un espacio de 2 horas, de 10 a 12
am para la transmisión de las informaciones que ellos precisaban.
Llama la atención que en la misma ciudad estén la 96.5, Cristal FM y
la 102.5 Arroyito Comunicaciones, ambas radios aparentemente sin licencia, que
transmiten propaganda electoral, una de ellas solo del partido colorado y la
otra del partido liberal.
De la misma manera, en todo el país, se están cerrando radios
comunitarias de la misma manera, no otorgando la renovación, no por un problema
en particular, sino por molestar a políticos o mafias de la zona, que tiene
injerencia sobre poderosos en el gobierno de turno.
Esta situación no es extraña a otros movimientos, pues en el Alto
Paraná, tenemos la misma situación con el SITRASAP (Sindicato de Trabajadores
de la Salud del Alto Paraná) que también sufrió esa misma desidia, no
tramitando la nueva comisión directiva y dilatando el reconocimiento para
frenar la excelente lucha que durante 26 años ininterrumpidos venía realizando
para beneficio de los trabajadores de la salud y además para los mismos
usuarios del servicio de salud pública.
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| Foto LA NACION |
Esta, es otra muestra de la Dictadura bajo la máscara de democracia
que vivimos en el país que nos debe importar a todos; más allá de la cortina de
humo de la FTC sobre los operativos en el norte y por el otro la campaña
electoral que nos tiene a todos distraídos, hay un país y una realidad que nos
llama a ser actores activos del cambio y no meros espectadores.
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